Algunos estudiantes en el sendero espiritual preguntan si todos los seres vivos, en cada encarnación, comienzan desde el mismo punto de partida o si por el contrario el conocimiento espiritual se va acumulando a lo largo de las diferentes encarnaciones.

 

A tal respecto, al final del capítulo 6 del Bhagavad Gita, Krishna le dice a Arjuna que uno aprende de manera rápida y sin esfuerzo las cosas que ya ha conseguido en las vidas anteriores. Esto es especialmente cierto en cuanto al conocimiento espiritual.

 

Todas las personas comienzan una nueva encarnación como un bebe, sin saber como hablar, caminar o incluso comer. Pero luego, te invito a que observes como algunas personas aprenden a tocar el piano a los 7 años y lo hacen de manera virtuosa, mientras que otras necesitan toda la vida para tocarlo de manera mediocre. Lo mismo sucede con todas y cada una de las áreas de conocimiento. Mientras que unas personas alcanzan grados de brillantez y excelencia, otras apenas consiguen progresos. ¿A que se debe esa aparente injusticia?

 

La respuesta está en que existe una continuidad eterna que va más allá de la ilusión de una vida única. La persona que aprende rápido y de manera fácil en alguna de las áreas, posee dicha aptitud porque en vidas anteriores ya alcanzó ese nivel de conocimiento y en esta encarnación solo necesita reactualizarlo. Lo mismo sucede con las aptitudes y conocimientos espirituales.

 

Si estudias de manera profunda y cuidadosa en esta vida, por ejemplo el Hatha Yoga, en tu próxima encarnación, la primerísima vez que alguien mencione algo referente al yoga, inmediatamente tendrás una clara sensación de familiaridad, sabrás de lo que trata y te zambullirás en el sin pensarlo. En cuanto leas unas pocas frases en un libro o escuches a un instructor, comenzaras a recordar y actualizar todo lo que ya habías estudiado y aprendido en vidas anteriores. El resultado será sorprendente a ojos de terceros.

 

De igual manera, si quieres recordar en la próxima encarnación esta vida actual, debes tener la firme intención de que así sea, manteniéndolo con persistencia durante todos los días de tu actual vida y proyectar el deseo de manera intensa hacia el futuro.

 

Nada comienza ni termina aqui, Todo es un eterno continuo.

 

Jesús Cediel